Un laboratorio dental es el lugar donde se fabrican los puentes, fundas, coronas, carillas… necesarios para los tratamientos de Odontología restauradora.
Este campo de la Odontología ayuda a recuperar la apariencia y la funcionalidad de uno o más dientes perdidos (implantes o prótesis) y restaurar las coronas dentales que han sido dañadas o que requieran un tratamiento estético (fundas y carillas).
Los laboratorios protésicos dentales, generalmente, son establecimientos y negocios aparte de las clínicas dentales y reciben pedidos de muchas clínicas odontológicas diferentes, sin embargo, ORAL tiene su propio laboratorio que trabaja en perfecta sincronía con nuestra clínica para brindar a nuestros pacientes la mejor atención.
A pesar de que los trabajadores de los laboratorios protésicos dentales no tienen contacto directo con los pacientes en clínica, las mediciones y especificaciones del odontólogo son más que suficientes para que en el laboratorio confeccionen las prótesis 100% personalizadas, y en muchos, buena parte de los flujos de trabajo están plenamente digitalizados.
Con todo, no es raro que una misma prótesis “viaje” varias veces entre la clínica y el laboratorio hasta que se consiguen con toda precisión los resultados deseados por el paciente y su dentista. El odontólogo dará los últimos ajustes a la prótesis en la clínica, para que quede exactamente como su paciente desee.